Fueron tres semanas intensas en Europa para el seleccionado argentino, que se prepara para el Preclasificatorio rumbo a los Juegos Olímpicos de París 2024, la próxima competencia oficial del combinado teniendo en cuenta que no jugará el Mundial 2023. La estadía en el Viejo Continente incluyó entrenamientos en la Ciudad Deportiva Camilo Cano de La Nucía, además de partidos amistosos con el objetivo de llegar a punto al mini-torneo.
El combinado dirigido por Pablo Prigioni arribó a la Argentina con un saldo de tres victorias (94-88 ante Cataluña, 66-65 contra Venezuela y 101-87 frente a República Checa) y una derrota (85-84 versus Bélgica) y, de esta manera, finalizó la primera parte de su preparación de cara al Preclasificatorio Olímpico FIBA.
El equipo albiceleste llegó a Buenos Aires y luego viajó a la provincia de Santiago del Estero, donde llevará a cabo la puesta a punto para preparar los partidos contra Panamá el lunes 14/8, Bahamas el miércoles 16/8 y Cuba el jueves 17/8. Antes de esos compromisos del Preclasificatorio Olímpico disputará un último amistoso en la provincia del norte argentino frente a Uruguay.
CÓMO LE FUE A LA SELECCIÓN ARGENTINA EN LOS AMISTOSOS ANTES DEL PRECLASIFICATORIO OLÍMPICO
El primer amistoso en Europa terminó con victoria de los dirigidos por Prigioni por 94-88 ante Cataluña. El partido disputado en el Pabellón Nou Congost de Manresa el pasado 25 de julio tuvo la actuación destacada de Lucio Redivo con 21 puntos, mientras que Facundo Campazzo anotó 11 tantos.
Una semana después, la Argentina obtuvo un triunfo agónico ante Venezuela en el Centro de Tecnificación de Alicante. Los argentinos festejaron gracias a que Redivo anotó un triple desde la esquina en la última pelota del partido. Ambos equipos propusieron un alto ritmo juego desde el principio y las diferencias se generaron por detalles. La sociedad entre Campazzo y Juan Fernández dio resultados, además del buen partido ofensivo de Luca Vildoza.
El duelo ante República Checa jugado en Brno el 4 de agosto fue un trámite para el combinado argentino. Con un gran partido de Nicolás Brussino, que terminó con 27 tantos y de Campazzo (19 puntos y 10 asistencias), los dirigidos por Prigioni mostraron un juego fluido, intenso con alto ritmo y preciso en ataque.
Esas virtudes del juego no se vieron frente a Bélgica. Brno fue nuevamente el escenario del amistoso y los argentinos sufrieron la poca efectividad en el perímetro, menor al 30%. Los belgas impusieron su jerarquía y doblegaron por un tanto de diferencia a los argentinos. El equipo siempre se mantuvo a tiro, luchando desde atrás, pero no pudo ponerse en ventaja.